También hay una
versión romántica y amable de Juan Espés “Greñicas”, como la que aparece en la
guía del Parque Cultural del Río Martín y que reproducen algunas webs de Montalbán,
por ejemplo, cronicasmontalbinas.blogspot.com.es. Una versión más que
diferente, opuesta a la que hemos visto:
“Os vamos a contar una
leyenda que se cuenta de boca en boca, sobre el bandolero «Greñicas» y la cueva
donde se refugió, en la montaña conocida como La Muela.
“Había un agricultor en
Montalbán llamado Juan Espes, quien, a finales del siglo XIX, se vio obligado a
esconderse en el monte por haber desafiado a un adinerado y apoderado cacique
de Montalbán al enfrentarse a él por los abusos que cometía contra los pobres y
al que dejó malherido tras su pelea.
“Encontró refugio en el
macizo de la Muela, donde perseguido por los seguidores y criados del cacique,
pudo despistarlos refugiándose en una cueva cuya entrada estaba oculta por los
matorrales que crecían alrededor. Durante mucho tiempo estuvo en el monte,
descuidando su aspecto, una larga y desordenada cabellera creció a la vez que
su barba, se alimentaba de lo que el monte le ofrecía y bebía agua de las
fuentes cercanas, la de los Vaciones y la de Valdemiguel.
“Después de mucho tiempo,
regresó a Montalbán creyendo que le habían olvidado o dado por muerto; su
aspecto descuidado y su gran melena le merecieron el apodo de «El Greñicas»,
contando a las gentes que se había refugiado en una pequeña cueva. Fue apresado
e ingresado en prisión, se fugó en varias ocasiones, regresando a Montalbán, y
cuentan que formó una cuadrilla de bandoleros que recorrieron el río Martín.
“Cuenta la leyenda que,
cansado de vivir acosado por los agentes de la ley, se marchó a Francia, donde
tuvo familia y murió.
“Esta es la historia del
bandolero «Greñicas» y su cueva”.
Ningún crimen... pero
sí una cueva que inmortaliza el nombre del bandido en la toponimia montalbina,
y una figura mítica para el patrimonio de la villa.
Y un apunte final, en
septiembre de 1920 fue noticia otro “Greñicas”, de raza gitana, un tal Marcos
Utrera Cortés, que en compañía de su hermano Juan (a) “Tartaja” asesinaron por
tierras granadinas a los dos guardias civiles que los trasladaban a un presidio.
Pie de foto: plano de
la cueva a la que da nombre Juan Espes (elmundotespera.wordpress.com).
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario